Retifismo |
||
Se conoce el Retifismo como la parafilia que se define por la atracción fetichista por los zapatos. El término proviene del apellido del escritor francés Nicolás Edme Restif de la Bretonne, que fue uno de los primeros en describir los síntomas de esta parafilia. Además en 1920, el psiquiatra Magnus Hirschfeld destapó el mundo del retifismo al comentar el caso de un cura con pasión por los zapatos, que solía rondar los pasillos de los hoteles para acariciar el calzado que los huéspedes dejaban a la puerta para ser limpiado. Este comportamiento suele darse más en varones, ya sea por contemplar los zapatos o, porque le gusta observar a la persona que los lleva puestos. En algunas ocasiones, les excita el mero hecho de observar el zapato puesto, independientemente de que ésta sea hombre o mujer. Se dice que quien presenta este comportamiento asocia el zapato y el pie con los genitales femeninos. Los zapatos, las botas y las zapatillas, presentan un alto componente erótico y son objetos que, por lo general, manifiestan determinadas características (suavidad, calidez) que evocan la primer infancia y, esto conlleva que la persona se pueda sentir atraída, con sentimientos de querer tocarlos, acariciarlos, olerlos e, incluso, chuparlos. Dentro de la amplia gama de fetiches tradicionales en la industria del calzado, la más común es la que hace referencia al cuero y encontramos diferentes adicciones que se relacionan directamente con ella: - La Altocalcifilia hace referencia a un un tipo de fetichismo, en el cual se obtiene placer al observar o llevar puesto zapatos de tacón altos. - El Retifismo se refiere al calzado realizado con pieles, las cuales se cree que pueda provenir de sensaciones de la infancia, de las caricias dadas a la mascota de la casa o el contacto con muñecos de peluche, convirtiéndose en un fetichismo táctil. Desde tiempos atrás las pieles y diferentes textiles derivados, como el latex y el caucho, se transformaron en puntos importantes dentro de escenas eróticas con tendencias sadomasoquistas; ya que el cuero y las pieles por su aspecto y olor que provienen de determinados animales, transforman el objeto fetiche en alimento para la fantasía. La elección de un fetiche se remonta a la infancia y es consecuencia de la educación y los diversos condicionamientos de ésta. Cabe destacar que las parafilias aparecen en las sociedades en las que la represión sexual es fuerte, y el sexo es comparado como una falta o como pecado. |
||
Publicado en apoyo psicológico por: Gemma Asarbai el 10-06-2013 archivado en Filias
|